"Cuando juego, no siento que sea yo quien juega; hay una energía que me atrapa y envuelve. Decimos que dejamos el cuerpo, y son los abuelos quienes se manifiestan a través de nosotros. Cuando juego, atravieso una puerta y entro en otro mundo.
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Mi nombre es María, y soy presidenta de la Asociación de Juego de Pelota Mesoamericana. El juego de pelota se juega únicamente con la carrera, y consiste en llevar la pelota en línea, tratando de pasarla por el medio. En cada cancha, deben estar presentes elementos simbólicos como las constelaciones, el sol, la tierra y los cuatro elementos. La pelota pesa 3.800 kilos, pero cuando se juega a distancia y con velocidad, parece pesar 7 kilos.
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Mi nombre es William Che, y soy de aquí, del pueblo de Expal Anp. Soy un jugador de pelota. Para comenzar un juego ceremonial, es necesario pedir permiso a los cuatro rumbos del universo y a la madre tierra. Nos conectamos con nuestros antepasados, quienes nos guían en este juego. El juego tiene múltiples facetas, incluyendo aspectos religiosos, deportivos y militares. El problema surgió cuando llegaron los españoles y prohibieron muchas cosas.
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Los españoles nos veían como brujos al jugar con una pelota tan pesada, utilizando solo la cadera para golpearla. Para ellos, éramos personas casi desnudas, pero adorábamos demonios. Si nos hubieran descubierto de manera diferente, sin invadir y sin juzgar, podríamos haber sido el deporte más famoso del mundo.
Antes de iniciar el proyecto de juego de pelota más americano en 2006, solo había alrededor de 30 jugadores en Sinaloa. Sentí la necesidad de transmitir esta tradición a través del juego. Hemos ayudado a muchos jóvenes a superar la adicción al alcohol y las drogas, ya que tienen una adicción más saludable al juego, deseando practicar este deporte en lugar de caer en las drogas y el alcohol, que no los hacen mejores personas.
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Este juego cambió mi vida de manera significativa. Era una persona diferente antes, pero decidí dejar atrás las drogas y el alcohol para concentrarme en el juego. Como jugador de pelota, me enorgullece ser maya y mostrar mi identidad cultural sin avergonzarme de ser quien soy. Quiero honrar a mis ancestros y demostrar mi verdadera esencia."
Spirituality and Energy: The video highlights the spiritual aspect of playing the Mesoamerican ballgame. Players describe feeling as though they are connected to their ancestors and that a special energy envelops them when they play.
Symbolism: The game incorporates symbolic elements such as the ball itself and representations of constellations, the sun, the earth, and the four elements, all of which are integral to the game.
Ceremonial Tradition: Prior to starting a game, players must seek permission from the four directions of the universe and Mother Earth, emphasizing the importance of ceremony and respect for nature in the sport.
Historical Significance and Challenges: The video discusses the long history of the Mesoamerican ballgame and how it was affected by the arrival of the Spanish. The Spanish did not understand its cultural and spiritual significance and imposed restrictions.
Positive Impact and Cultural Identity: Playing the Mesoamerican ballgame has had a positive impact on individuals within indigenous communities, serving as an alternative to addiction and promoting cultural pride. Players express their pride in their Mayan heritage and their commitment to preserving their cultural identity, including their language.